Una transferencia bancaria es un envío de dinero de una persona o entidad financiera a otra. Entre bancos, ya sea en transferencias nacionales o internacionales, es un tipo de movimiento muy común para el que se establecen dos participantes:
A menudo, esta operación bancaria para transferir dinero se confunde con el traspaso, pero no son lo mismo. Los traspasos son movimientos de dinero que se dan dentro de una misma entidad bancaria.
En la actualidad, hay cuatro formas de realizar transferencias bancarias. Se pueden hacer por la vía tradicional o por vías más novedosas, y la principal diferencia entre ambas es la sucursal. Veámoslo.
Esta es una opción más para ordenar nuestras transferencias. El cajero automático no solo sirve para retiradas de efectivo, ingresos de dinero o consultas globales de nuestras cuentas. También podemos manifestar nuestra intención de movilizar un dinero.
Para ello, tan solo tenemos que insertar nuestra tarjeta en el cajero, introducir nuestros datos y PIN bancario y presionar sobre la tecla digital que indique ‘Transferencias’. El proceso es muy sencillo y con dos o tres pasos deberíamos tener la transferencia hecha.
La opción de hacer las transferencias en sucursal siempre ha estado ahí, de la mano de los clientes. Antes de nacer la banca online, esta era la opción más recurrente a la hora de movilizar una cantidad de dinero de una cuenta a otra.
Para realizarla de esta manera, lo único que se necesita es tener claros los datos del destinatario. Con esa información, tendríamos que ir a la centralita de la sucursal y facilitar los datos.
Existe la opción de realizar la transferencia por teléfono, también. Si no dispones del tiempo necesario para ir a una sucursal u oficina a realizar tu transferencia, siempre puedes llamar para que un comercial de tu banco te acompañe y realice por ti el movimiento de dinero.
Con esta vía, nos ahorramos el trayecto hacia la sucursal y evitamos perder tiempo. No obstante, infórmate en tu banco particular sobre las comisiones de esta operación.
La última vía para realizar nuestras transferencias es la del móvil. El smartphone ha permitido a los bancos revolucionar la forma en la que proporcionar sus servicios. Y este, el de los movimientos entre bancos, es uno de ellos.
Para ello, tan solo tendremos que descargarnos la App particular de nuestro banco. Dentro encontraremos un botón de “Operaciones” o “Transferencias”. Al pulsarlo, se desplegarán las opciones y los campos para rellenar los datos pertinentes. Sencillo y rápido.
Hay otra forma de clasificar las transferencias. En función de cuánto tiempo tarden en llegar a la cuenta de destino, a la del beneficiario, las transferencias podrán ser ordinarias, urgentes o inmediatas. Vemos una por una detenidamente:
Como ves, la principal diferencia entre todas ellas es el tiempo de ejecución. Consulta con tu banco cuánto tardarán tus transferencias o consúltalo de forma gratuita en la app oficial.
