Trucos y estrategias para ahorrar en comida

Por Renault Bank - 4 julio, 2025

Ahorrar en comida no significa renunciar a comer bien. De hecho, con un poco de planificación y algún pequeño cambio de hábitos, es posible reducir el gasto mensual sin sacrificar la calidad de los alimentos ni renunciar a los sabores más deliciosos. En este artículo encontrarás trucos para ahorrar en comida, organizados en estrategias prácticas que puedes aplicar desde hoy mismo en tu cocina.

Comprar productos de temporada

Uno de los errores más comunes al hacer la compra es no tener en cuenta la estacionalidad de los alimentos. Los productos de temporada nos ayudan a mantener nuestra salud financiera, ya que son más baratos. Además, suelen tener la ventaja de ser más frescos y tener mejor sabor, pues no requieren procesos complejos de producción o conservación ni transporte desde otros países.

Por ejemplo, comprar fresas en invierno puede costar el doble que en primavera. Puedes consultar calendarios de frutas y verduras de temporada para saber qué productos conviene comprar cada mes. Además, esta práctica favorece a los productores locales y suele ser más sostenible.

Incluir marcas blancas

Las marcas blancas son una de las formas más rápidas y eficaces de reducir el total de la cesta de la compra. Su precio suele ser hasta un 30 % más bajo que el de las marcas comerciales, sin que ello suponga una gran diferencia en calidad.

De hecho, muchos productos de marca blanca se elaboran en las mismas fábricas que los de marca conocida. Pastas, arroces, legumbres, lácteos o conservas son solo algunos ejemplos donde la diferencia de sabor es mínima, pero el ahorro acumulado a lo largo del mes puede ser muy significativo.

Aprovechar ofertas diarias

Las ofertas y promociones pueden ayudarte con la economía familiar, siempre que se usen con criterio. Muchos supermercados lanzan descuentos diarios en productos frescos con fecha de caducidad próxima, como carnes, pescados o pan. Muchas veces, es posible congelar estos alimentos para usarlos más adelante, evitando el desperdicio. También es útil estar atento a las promociones tipo “segunda unidad al 50 %” o “3×2”.

Si tu objetivo es el ahorro, es importante no dejarse llevar por la sensación de encontrar una ganga y aprovechar estas ofertas solo para adquirir ingredientes que formen parte habitual de la dieta. Un truco práctico es revisar los catálogos online antes de ir al supermercado. Así podrás organizar tu compra en torno a las ofertas disponibles, y no al revés.

Sacar partido al batch cooking y planificar menús

Planificar los menús semanales es uno de los mejores trucos para ahorrar en la cocina. Saber con antelación qué vas a preparar te permite comprar solo lo necesario, evitar el desperdicio y reducir el número de veces que visitas el supermercado (con lo que también evitas compras impulsivas).

El batch cooking consiste en preparar varias raciones de comida en una sola sesión, generalmente el fin de semana. Puedes dejar platos listos para toda la semana o bases que se combinan fácilmente (como arroz, legumbres cocidas, verduras asadas o salsas caseras). Con esta técnica no solo ahorras dinero, sino que también ahorras tiempo. Además, al cocinar en volumen, puedes optimizar el uso de los ingredientes y la energía, al usar el horno o la vitro para varias preparaciones a la vez.

Investigar los establecimientos con el mejor precio

No todos los supermercados tienen los mismos precios, ni siquiera para los mismos productos. Si quieres ahorrar, conviene comparar precios entre tiendas y buscar aquellas que ofrecen mejor alternativa.

Existen aplicaciones y webs que te permiten ver qué productos están más baratos según la zona en la que vives. También puedes combinar supermercados para hacer compras estratégicas: uno para comprar productos frescos y otro para despensa o limpieza, por ejemplo.

Evitar las compras impulsivas

Las compras impulsivas son enemigas del ahorro. Para evitarlas, es fundamental ir al supermercado con una lista cerrada y no salirse de ella. También es recomendable establecer un presupuesto mensual para alimentación.

Otro consejo importante: no hacer la compra con hambre. Está demostrado que cuando tenemos apetito somos más propensos a comprar alimentos poco saludables y más caros.

Y si quieres que tu ahorro vaya más allá de los trucos en la cocina, una buena estrategia es abrir una cuenta de ahorro como la Cuenta Contigo, y automatizar una pequeña transferencia mensual. Así, no solo apartas dinero de forma constante, sino que lo haces crecer con rentabilidad.

En Renault Bank te lo ponemos fácil con nuestra Cuenta Contigo, una cuenta que ofrece un 1,61 % TAE y te permite acceder a tu dinero siempre que lo necesites. Y si tu objetivo es ahorrar a largo plazo, puedes optar por nuestros Depósitos Tú+, con liquidación mensual y trimestral, y donde eliges el importe y el plazo que más te convengan: a 12 meses con un interés fijo garantizado del 1,91 % TAE, a 24 meses con un interés fijo garantizado del 1,96 % TAE y a 36 meses con un interés fijo garantizado del 2,01 % TAE.

Ahorrar en la cocina es solo el primer paso. Con decisiones inteligentes también puedes hacer crecer tus ahorros mes a mes.